Empeñar tus bienes de manera temporal puede ser una alternativa para aliviar situaciones en las que el gasto se ha elevado más de lo habitual, como puede ocurrir tras unas vacaciones, después de Navidad o de celebraciones familiares como graduaciones, por ejemplo.
Como en todo, conviene saber qué tenemos que tener en cuenta a la hora de acudir a la casa de empeño para evitar confusiones innecesarias.
1. Compara
- Visita varios sitios antes de decidir dónde vas a empeñar tus pertenencias. Es posible que necesites dinero urgente pero las prisas te pueden llevar a pagar de más por lo mismo. Fíjate bien quién te da más al menor interés. A menudo las diferencias entre casas de empeño son considerables.Ten en cuenta también el tipo de objetos que vas a empeñar. No es lo mismo empeñar un auto o empeñar oro o empeñar un pequeño electrodoméstico. Cada tipo de objeto requerirá una serie de cuidado a tener en cuenta para obtener la máxima lana posible.
2. CAT (Costo Anual Total)
- Básicamente este es el indicador que debes tener en cuenta. Es el interés anual que te cobrarán las casas de empeño y engloba los gastos ocasionados en el proceso, tales como almacenaje, avalúo, comisiones, etc.
- Es importante aclarar que existen dos tipos de casas de empeño, las que son empresas privadas mercantiles, con ánimo de lucro, no siempre reconocidas en la Procuraduría Federal del Consumidor (PROFECO) y por lo tanto susceptibles de contener cláusulas abusivas, y las Instituciones de Asistencia Privada (IAP), sin fines de lucro, como, por ejemplo, Fundación Dondé. EL CAT se sitúa alrededor del 250% en las empresas privadas mientras que en las IAP's es de 120%. El margen es considerable.
3. Sé realista
- Es fundamental que estudies detenidamente los plazos e intereses a pagar para recuperar los bienes empeñados. Comprométete sólo si ves posible hacer frente a las obligaciones de tiempo y dinero del contrato ya que si no la pérdida del objeto empeñado, un auto, por ejemplo, puede ser muy perjudicial para la economía de la casa.
4. Lee detenidamente el contrato
- No es momento de tener dudas. Pregunta todo lo que no entiendas y presta atención a la letra pequeña. Lo ideal es que cuando decidas empeñar tus objetos tengas muy claro los plazos de pago, el límite de renovaciones del contrato (refrendos) y la demasía, que es la diferencia entre lo que debe el pignorante (el que ha obtenido el préstamo) y el dinero en que se vende la prenda por parte de la casa de empeño cuando no se llega a recuperar ésta. La demasía pertenece al deudor y para poder reclamarla hay que conservar el contrato del préstamo y estar atentos por si hay un plazo determinado para solicitarla.
Si piensas empeñar tus bienes, sigue estos consejos y tu experiencia será satisfactoria a la vez que alivias tu economía en un momento de apuro. En las más de 300 sucursales con las que Fundación Donde cuenta a lo largo de todo el país encontrarás profesionales que aclararán todas tus dudas y te aconsejarán para que obtengas el mayor beneficio al objeto que deseas empeñar.
Consulta vigencia, términos y condiciones en tu sucursal Fundación Rafael Dondé, I.A.P. más cercana o en página www.dondeempenos.com.mx. El valor del artículo dependerá de sus condiciones y características. La autorización del préstamo es una facultad discrecional de Fundación Rafael Dondé, I.A.P. por lo que se reserva el derecho de otorgarla o negarla. Información sujeta a cambios sin previo aviso. Aplican Restricciones.
